YPF ya negocia con otra supermajor para reemplazar a Shell en el plan del GNL

El año 2025 se encamina a cerrar como un período clave para YPF, especialmente en lo vinculado al Plan 4×4 que impulsa su presidente y CEO, Horacio Marín. Tras la decisión de Shell de retirarse del megaproyecto de exportación de gas natural licuado (GNL), la petrolera de bandera aceleró negociaciones con otra operadora supermajor para sumarse al desarrollo.

Las gestiones con esta compañía internacional de primer nivel comenzaron el 3 de diciembre en Londres, en el marco de la World Energy Capital Assembly (WECA), donde Marín recibió el premio a la “Compañía Regional del Año” otorgado por el Energy Council. Allí, directivos de YPF mantuvieron encuentros estratégicos con distintas operadoras globales interesadas en el proyecto Argentina LNG.

Según trascendió, la salida de Shell ya era conocida internamente por YPF al momento de esas reuniones. Si bien no se reveló el nombre de la nueva potencial socia, se confirmó que se trata de una supermajor y que no es ExxonMobil, firma con la que YPF mantiene conversaciones avanzadas, aunque en carácter de offtaker y no como socia directa del proyecto.

El plan exportador de GNL contempla alcanzar una capacidad total de 18 millones de toneladas anuales. De ese volumen, 12 millones ya están comprometidos junto a la italiana ENI y la firma XRG del grupo ADNOC, de Emiratos Árabes Unidos. La expectativa es que la nueva socia aporte las 6 millones de toneladas restantes.

Las negociaciones avanzaron de manera significativa el jueves 18 de diciembre, mientras la conducción de YPF se encontraba en Plaza Huincul para la inauguración del Real Time Intelligence Center del Complejo Industrial. El nivel de avance es tal que YPF ya notificó formalmente a ENI sobre la incorporación de un nuevo actor al esquema del proyecto.

La estrategia contempla distintas alternativas de asociación, que incluyen tanto un desarrollo completamente integrado como esquemas de infraestructura compartida, especialmente en lo referido a gasoductos y grandes obras logísticas.

En paralelo, YPF definió su plan de inversiones para 2026, que alcanzará los 6.000 millones de dólares. De ese total, unos 4.500 millones se destinarán al desarrollo de Vaca Muerta, consolidando el foco estratégico de la compañía en los recursos no convencionales.

La petrolera busca acelerar la producción de shale oil y shale gas con el objetivo de iniciar, a partir del 1 de enero de 2027, las exportaciones de crudo desde el nuevo puerto del oleoducto Vaca Muerta Oil Sur (VMOS).

El segmento downstream concentrará alrededor de 1.200 millones de dólares, principalmente en la refinería de Luján de Cuyo, donde se encuentran en etapa final las obras de ampliación y modernización iniciadas este año.

Una porción menor de la inversión se orientará al desarrollo tecnológico, uno de los pilares del Plan 4×4, que permitió mejoras sustanciales en eficiencia operativa y capacidad de procesamiento en las refinerías.

Gracias a esta estrategia, YPF cerrará 2025 con una producción cercana a los 208.000 barriles diarios de petróleo propio, duplicando el promedio registrado al inicio de la gestión de Marín. El objetivo de la compañía es volver a duplicar ese volumen y alcanzar los 400.000 barriles diarios hacia mediados de 2028.

Con este escenario, YPF refuerza su posicionamiento como actor central del desarrollo energético argentino y avanza en la consolidación de un proyecto de GNL que busca insertar a Vaca Muerta en el mercado global de gas natural.

 

Fuente: Info Energía